Argentina: Un militante político no es un gato de iglesia que alimenta el padre
Juventud militante: Kirchner y su legado
La muerte de Kirchner tiene como epicentro la crisis insoluble “del modelo”, agudizada por el asesinato de Mariano a cargo de una patota oficial que operó en el marco “del modelo” que terceriza la represión al movimiento obrero independiente.
La salud debilitada de NK no soportó tener que dar explicaciones por el asesinato de Mariano. Al colapso final, también aportó la discusión de la noche anterior con Moyano, quien reclamó airadamente por la maniobra con que NK le vació el quórum del PJ Provincial. Así la crisis y la falta de horizonte devoraron a la principal figura del gobierno.
“El modelo” que tanto se invoca ya había demostrado ante el pueblo su fracaso 2 años atrás y llevó a NK a perder las elecciones a manos de un sector insignificante, oportunista, sin programa, hoy desperdigado y que incluso dentro de los Consejos de PBA es el sostén del FPV, que sin el voto de esa runfla estaría perdido.
Suena como “una joda para Tinelli” que alguien en su sano juicio siga llamando a la entrega del país “un modelo Nacional y Popular”, cuando tiene en su prontuario haber vetado el 82% móvil para 5 millones de jubilados.
NK estuvo muy por detrás de Eva Perón que señaló: “Donde hay una necesidad hay un derecho” y muy cerca de la usura internacional a la que le garantizó, vía la ANSeS, el pago de los bonos de la deuda.
El aparato propagandístico montado no tiene límites; la política de Shock explicada por Naomí Klein tiene en el kakismo un seguidor que aprovechó -a lo buitre- la muerte para medir encuestas, algo que ya vimos con Alfonsín usadas para maquillar al hijo y “relanzar” a la UCR que pasó del 4 al 10% en la imagen.
El sepelio de NK fue un espectáculo de pompa fúnebre faraónica.
La puesta en escena fue un guión pautado paso a paso por Javier A. Grosman, director de la Unidad Ejecutora Bicentenario de la Revolución (según decreto presidencial 30/12/2009) y de Diqui James, director del grupo teatral Fuerza Bruta. Cámaras satelitales y estudiada coreografía circular, hicieron del velatorio un evento de nivel.
Es bueno señalar que la intoxicación mediática termina en estallidos sociales porque el cartón pintado no aguanta tormentas, máximo si provienen de la bancarrota capitalista internacional.
NK en vida lideró una fracción patronal, su cometido de poner en pie una burguesía industrial fracasó. NK no vino como Evo Morales ni como Chávez de la oposición política al llamado neoliberalismo, al contrario, salió del seno menemista y fue primero su alumno aplicado en Santa Cruz: privatizador de YPF y del Banco Santa Cruz que entregó sin deudas, las que antes hizo que pagara el Estado.
La 1er. caja del kirchnerismo, u$s 1.200 millones girados al exterior, vienen de la privatización de YPF. Otra enajenación del patrimonio santacruceño vino de concesiones pesqueras, donde las empresas a cambio del negocio aportaron millones a campañas de los K.
NK cambió de caballo recién cuando Rodríguez Saá declaró el default y luego Duhalde la pesificación y la devaluación. NK fue el último en asumir el cambio de frente de la burguesía nacional, que antes se había servido del endeudamiento externo, las privatizaciones y la liquidación de conquistas obreras y sociales.
A Aguas Argentinas, el Correo y Aerolíneas, tres casos de corrupción que los k intentaron salvar, tuvieron que estatizarlas.
NK fue quien volvió a pagar la deuda externa que se encontraba en default.
Y fue al rescate del capital financiero a través de la estatización de los fondos de las AFJP. Esto, que debía servir para garantizar las jubilaciones (las AFJP se habían derrumbado en 2002), permitió al gobierno pagar más de u$s 20.000 millones de deuda externa que fueron garantizados con un endeudamiento similar de la Anses.
La llamada deuda "intra-estado" -que representa hoy el 55% de la deuda pública-, es una confiscación de las jubilaciones, de bancos estatales y del Central. El objetivo de este "desendeudamiento" es la reapertura de un nuevo ciclo de endeudamiento con el capital financiero internacional.
En la cuestión estratégica de la deuda, el kirchnerismo ha mostrado su naturaleza social conservadora. Los vínculos con el capital financiero, sacudidos por la bancarrota de 2001, fueron reconstruidos.
Este legado de sometimiento nacional ¿puede ser tomado como bandera por la juventud?
Durante el Estudiantazo la juventud K intentó que no se comparara el derrumbe educativo de Macri con el de los K, no lo lograron fueron desbordados en número y argumentos políticos. La politización juvenil fue criticada por punteros de Macri y de NK en la TV, quienes disfrazados de padres hostigaban a los pibes que levantaban la bandera de la acción directa para resolver lo que el Parlamento y los Consejos no hacen.
En septiembre los K convocaron a la Juventud Peronista al Luna Park para fusionar La Campora con la Juventud Sindical, pero el sector que milita contra la destrucción educativa estaba en las calles o tomando colegios y facultades. El debut de La Campora/Juventud Sindical fue el 16/9 armando cordón para que gruesas columnas independientes del gobierno no pasaran a la Plaza de Mayo. Fracasaron. La maniobra K de por terminar con las tomas fue repudiado por asambleas que expulsaron a los rompehuelgas.
La irrupción de la juventud luchadora no se inició en el velatorio K sino en las calles en el Argentinazo, la recuperación de los centros de estudiantes universitarios, terciarios y secundarios bebió de esas luchas, de debates políticos y piquetes, la dirección juvenil en lucha está en manos de la izquierda piquetera. Los asesinatos de 39 jóvenes durante la huida de De La Rúa, los asesinatos de Kosteky y Santillán por Duhalde y Aníbal Fernández, la política oficial de gatillo fácil que hasta el 1/12/2009 llevaba 1320 asesinados en las barriadas, el crimen de Mariano y el estado vegetal de Elsa son el rio de sangre que divide la cancha “ellos y nosotros”.
El sello distintivo K es que sus agrupaciones juveniles no luchan sino que se alimentan del sometimiento nacional; no pelean por el salario ni enfrentan a la patronal ni a la burocracia en sus lugares de trabajo.
Los jóvenes delegados y activistas sindicales luchadores son herederos del clasismo setentista, no de la Juventud Sindical moyanista.
Mariano es un emergente de esa juventud que enfrenta a las patronales y a la burocracia sindical peronista (principal herramienta K), que se esfuerza por construir una dirección clasista en los sindicatos, independiente del Estado.
lisandromartinez47@yahoo.com.ar