Uruguay: El enfoque de Clase

22 Septiembre 2010 , Escrito por El polvorín Etiquetado en #Politica

Nota de El Polvorín: Desde el lunes hasta el jueves, publicaremos una nota al día de "Los caminos de los los quijotes", columna de Intransigencia Socialista de la Asamblea Popular que sale los sábados en el Diario La Juventud, las notas ya fueron publicadas este año, pero los conceptos mantienen vigencia.

Los Caminos de los Quijotes

El enfoque de Clase

Con el nacimiento de la burguesía surge el proletariado, en una relación cuyo desarrollo tempranamente previera Marx. A pesar de los esfuerzos de los teóricos burgueses en encontrar otras clases protagónicas, el esquema original se mantiene en todos sus términos hasta hoy día. Sobre estas clases y su papel, a esta altura existen pocas dudas, no ocurre lo mismo en relación al lugar que le corresponde a la pequeña burguesía y a su mentalidad. De la comprensión de esto último recién se podrá llegar a las explicaciones de una serie de fenómenos, así al esclarecimiento de aspectos importantes para convertir una estrategia de poder. Las deformaciones provocadas por el imperialismo, como en esta última crisis que ha padecido, han borrado la claridad en la contradicción burguesía- proletariado. La pequeña burguesía con sus características de clase oscilante, inestable, impaciente, individualista, vacilante, vive bajo una contradicción básica. Por un lado su afinidad ideológica con la burguesía por su ubicación en el proceso productivo, se rige por el mismo sistema de valores que esta; por otro lado una base material en permanente deterioro que lo aproxima a las condiciones de vida del proletariado y asalariados comunes. Pero la importancia de esta clase intermedia no consiste en si misma, es decir en el peso político que puedan tener los clásicos pequeños burgueses; que están agrupados en: Pequeños comerciantes, industriales, rentistas, campesinos pobres y medios, como así, (pequeños productores que explotan diferentes rubros de la actividad agropecuaria etc.) Producen en predios que son propios o los arriendan. Artesanos, pequeños talleristas, etcétera. La importancia es relativa, sino por su proyección ideológica sobre los asalariados (proletarios, empleados y funcionarios). Señalamos, la mentalidad pequeño burguesa, en nuestro país, se ha consolidado y es histórica, con mejor desarrollo desde Luis Batlle para adelante, en el sector de empleados públicos y privados. Estos constituyen sin duda una capa intermedia entre la burguesía y el proletariado, obreros y empleados. En sentido estricto, como el obrero vive de un salario, cada vez de menor poder adquisitivo, pero el pequeño burgués no ocupa el papel fundamental que tiene el obrero en la producción creando valor. Es así que si hacemos una clasificación de tipo ideológico, resultando, predominar ampliamente la ideología pequeño- burguesa. Históricamente en sectores del proletariado y en mayor medida los empleados y funcionarios públicos con esa mentalidad, han sido puntales del régimen capitalista. Uno de sus frutos ha sido la compartimentación entre lo sindical y político. Lo primero representado en sindicatos combativos y clasistas, con direcciones integradas por anarquistas, comunistas y socialistas. Lo segundo en la adhesión a los partidos tradicionales creados precisamente por la burguesía, para defender y representar sus intereses. Un fenómeno de propiedad inusual, es el Frente Amplio, vertebrado por el Mujiquismo, que controla al estilo del Peronismo argentino, todas las organizaciones sociales establecidas… Organizaciones locales absorbidas, simuladoras, que teatralizan mantener una lucha Clasista de Mentira. Funcionales a la burguesía y a la clase política, donde abundan los burócratas- oportunistas, con esa mentalidad pequeño-burguesa que estábamos analizando.

Primera gran conclusión: El espíritu pequeño- burgués esta metido por todos los poros de nuestra sociedad. En sus instituciones, en su modo de vida, en su literatura, en sus organizaciones sindicales y políticas etc. Es una Ley inviolable del Sistema. Claro esta que en los periodos de auge económico la clase dominante se fortalece y todavía reparte migajas entre los trabajadores. Pero para los periodos de crisis, la sufren las clases populares.

Intransigencia Socialista de la Asamblea Popular.